Momentos de paz, si (no) los hubo. Una mirada poco penetrante, pocas veces encontrada, pero muy cálida y hermosa. Ella fue, es y será. No como aquel día de un Marzo olvidado o como el verano de ese año que dejaron las primeras páginas de un cuaderno sin escribir (o más bien, escritas sin razón), pero sí como lo que uno quiere llevar siempre, lo que no va a recordar tan solo por cómo fue sino por lo que quería que sea. No es posible determinar cuales marcas producen más dolor, o al fin y al cabo, cuales perdurarán en el tiempo por un lapso mayor; sólo me animo a decir que ambas llevaré tatuadas el tiempo que sea precisamente necesario.
¿Es acaso tanto lo que uno busca en una mirada?
No. Pero lo puede decir todo.
Y del otro lado del camino me encuentro mirando atrás. Siempre pensé que este sería el momento en que pocas cosas queden por jugar. Pero no. Paré antes, y quise ver que tenía y tengo. ¡Las cosas que he dejado! (no lo lamento, lo sufro)
La voz menos esperada es una de las que extraño, contandome anécdotas que poco me interesan y sonriendo por cada hoja que se lleva el viento. Finalmente encontré la forma de medir mi distancia.
Hola Matías, :)
2 comentarios:
¿Es acaso tanto lo que uno busca en una mirada?
áháh,nosé los demás.Pero yo creo que lo busco TODO en la mirada.
claro que si. a las palabras se las lleva el viento y podes decirlas pero no sentirlas, los actos se pueden fingir,pero la mirada ¿cómo se manipulas? La gente normal (no como nosotros ,jjajaja bueee) sólo piensa que ve un par de ojos y nada más,pero creo que si cada persona penetrara más en la mirada del otro se daría cuenta de las miles de cosas que uno puede descubrir con tan sólo mirar profundamente los ojos de ésa persona.
Me voy al colegio matias,jÁ
Un béso tú (:
Publicar un comentario